Dos pequeñas islas mirándose fijamente me hace pensar en que la poesía, antes que
cualquier otra cosa, debería ser una herramienta para amar el mundo. “Dejar de pedir, por
fin dar”, dice la poeta en uno de sus fantásticos poemas que son cada uno un viaje breve
y psicodélico hacia la lucidez . Si solo el 5 por ciento de lxs poetas del mundo vinieran de
Marte (como Tilsa Otta), cuanto más evolucionada sería la poesía y cuánto más
preparados estaríamos lxs humanos para enfrentar el futuro.   

Dos pequeñas islas mirandose fijamente - Tilsa Otta

$19.800
Dos pequeñas islas mirandose fijamente - Tilsa Otta $19.800

Dos pequeñas islas mirándose fijamente me hace pensar en que la poesía, antes que
cualquier otra cosa, debería ser una herramienta para amar el mundo. “Dejar de pedir, por
fin dar”, dice la poeta en uno de sus fantásticos poemas que son cada uno un viaje breve
y psicodélico hacia la lucidez . Si solo el 5 por ciento de lxs poetas del mundo vinieran de
Marte (como Tilsa Otta), cuanto más evolucionada sería la poesía y cuánto más
preparados estaríamos lxs humanos para enfrentar el futuro.