En tiempos de marcada globalización, grandes corrientes migratorias a nivel mundial y extrema turbulencia social, Imtiaz Dharker presenta su visión de la geopolítica, la inmigración y la condición del individuo que pertenece a dos lugares y, al mismo tiempo, a ninguno, desde una perspectiva feminista.

En El terrorista sentado a mi mesa, Dharker plantea cuestiones críticas acerca de la forma en que vivimos, comemos, trabajamos, viajamos, escuchamos las noticias y atravesamos conflictos sociales. Estos poemas e ilustraciones surgen en un mundo que cambia constantemente y que percibimos por medio de pantallas que distorsionan la realidad: la televisión, los celulares, las vidrieras, los espejos, el agua, la respiración del otro.

¿Qué sabemos de la persona que tenemos al lado en la calle, en casa, que comparte nuestra mesa, nuestro cuerpo?