Valeria Cervero frota, en cada uno de los poemas de Un ciervo en tu memoria, esa cuerda que tensa el contacto entre el cuerpo y el universo. Cristalizando así ese vínculo complejo que se asienta en la memoria como un ciervo, a veces vibrante, a veces herido. Alrededor, giran las grandes cuestiones de la existencia -la injusticia, el dolor, la pérdida- en íntimas dosis de alta poesía. Celebro la precisión y la delicadeza del lenguaje. Y la contundencia de lo inesperado: “la marca que deja el aire / al rozarnos”. 

 

  María Malusardi 

 

Imaginar paredes en medio del viento, buscar un punto en el horizonte, registrar el tiempo de esa flor que nace casi a escondidas. Este poemario de Valeria Cervero abre caminos que nos llevan a la escucha de la memoria del cuerpo y de su entramado con lo viviente, y nos recuerda, con la belleza de la sutileza, que "en medio de las corridas, los gases, los disparos que atraviesan décadas y cuerpos" como dijo Simone Weil, la atención es la más rara y pura forma de generosidad.

 

Bárbara Alí 

Un ciervo en tu memoria - Valeria Cervero

$18.000
Un ciervo en tu memoria - Valeria Cervero $18.000

Valeria Cervero frota, en cada uno de los poemas de Un ciervo en tu memoria, esa cuerda que tensa el contacto entre el cuerpo y el universo. Cristalizando así ese vínculo complejo que se asienta en la memoria como un ciervo, a veces vibrante, a veces herido. Alrededor, giran las grandes cuestiones de la existencia -la injusticia, el dolor, la pérdida- en íntimas dosis de alta poesía. Celebro la precisión y la delicadeza del lenguaje. Y la contundencia de lo inesperado: “la marca que deja el aire / al rozarnos”. 

 

  María Malusardi 

 

Imaginar paredes en medio del viento, buscar un punto en el horizonte, registrar el tiempo de esa flor que nace casi a escondidas. Este poemario de Valeria Cervero abre caminos que nos llevan a la escucha de la memoria del cuerpo y de su entramado con lo viviente, y nos recuerda, con la belleza de la sutileza, que "en medio de las corridas, los gases, los disparos que atraviesan décadas y cuerpos" como dijo Simone Weil, la atención es la más rara y pura forma de generosidad.

 

Bárbara Alí