Intento evocar el momento en el que María Florencia Dumont me dijo en secreto que estaba entrenando en un comando armado. Tenemos 17 años. Estamos bajo el techo de la escuela de María Claudia Falcone, que ahora es nuestra escuela porque María Claudia Falcone sigue desaparecida y nosotras evidentemente no. Tenía 16 años y se la llevaron de acá, donde María Florencia Dumont me dice en secreto que se entrena con armas arrancando el nuevo milenio. Es el pasillo de la escuela. Y yo sé perfectamente que María Florencia Dumont además de ser sobrina de desaparecidos, y una de mis mejores amigas, sufre de disforia narrativa. Le llamo así al suceso.

(Fragmento de "Bohamí")

Cuatro piezas dramáticas. Textos que cargan a cuestas con la historia nacional contemporánea, como contexto y problema. Que establecen un vínculo filoso con el presente y proponen paisajes de desmesura apocalíptica. La crisis aparece como un motivo, o un loop que define una clave de lectura y una forma de la experiencia: la sensación de descomposición permanente, en los cuerpos que flotan, en las relaciones, en los espacios desgarrados, en la multitud que siempre aparece soñolienta remolcada por la fuerza mayor (como quien, con resignación, se deja arrastrar por una ola).

 

Teoría de las aguas - Magda de Santo

$16.000
Teoría de las aguas - Magda de Santo $16.000

Intento evocar el momento en el que María Florencia Dumont me dijo en secreto que estaba entrenando en un comando armado. Tenemos 17 años. Estamos bajo el techo de la escuela de María Claudia Falcone, que ahora es nuestra escuela porque María Claudia Falcone sigue desaparecida y nosotras evidentemente no. Tenía 16 años y se la llevaron de acá, donde María Florencia Dumont me dice en secreto que se entrena con armas arrancando el nuevo milenio. Es el pasillo de la escuela. Y yo sé perfectamente que María Florencia Dumont además de ser sobrina de desaparecidos, y una de mis mejores amigas, sufre de disforia narrativa. Le llamo así al suceso.

(Fragmento de "Bohamí")

Cuatro piezas dramáticas. Textos que cargan a cuestas con la historia nacional contemporánea, como contexto y problema. Que establecen un vínculo filoso con el presente y proponen paisajes de desmesura apocalíptica. La crisis aparece como un motivo, o un loop que define una clave de lectura y una forma de la experiencia: la sensación de descomposición permanente, en los cuerpos que flotan, en las relaciones, en los espacios desgarrados, en la multitud que siempre aparece soñolienta remolcada por la fuerza mayor (como quien, con resignación, se deja arrastrar por una ola).