Susana Rosano acomete aqui la tarea de cuestionarse sobre los motivos de la proliferacion del mito de Eva Peron en la literatura argentina. Asi, descubre que esa formidable recuperacion y diseminacion simbolica no puede ser ajena a otros procesos sociales de la Argentina. De alli que el interes de este trabajo consista en su manera de vincular elementos aparentemente dispersos para engarzarlos en una red de sentido que echa luz sobre el presente. En su indagacion Susana Rosano hace fundamental hincapie en una rama espuria de la genealogia literaria argentina, que viene siend caracterizada como la de los hijos bastardos (de Borges y/o de Eva), apoyada en la idea de una filiatria, segun la habia expresado con especial suspicacia Witold Gombrowicz ya en la decada del 50. En este sentido dice Rosano: Desubicar el mito de Eva Peron, desapropiarlo, hacerlo impropio en un contexto que subvierte las condiciones de posibilidad del relato nacionalista es, ademas de una blasfemia, un intento desesperado y melancolico por desbaratar el discurso excluyente del nosotros articulado desde los relatos nacionales. El texto de Susana Rosano realiza, por lo tanto, una rearticulacion poniendo sumo cuidado en hacer visibles las esferas de genero, del populismo y de la modernidad segun los movilizo el peronismo, con la particularidad, ademas, de considerarlos como pilares de significacion de una maquinaria donde las mujeres (y no solo Eva Peron) se inscribirian en forma dinamica e iconizada dentro de una productividad nacionalista que implicaba una reformulacion del Estado. De ese modo, lo que vendria a originarse a partir de Eva como figura iconica, seria, en definitiva, la aparicion a flor de piel del inconsciente literario del peronismo, asi como la revancha sobre las fuerzas en pugna que impidieron a la persona real aceptar la candidatura a la Vicepresidencia el 22 de agosto de 1951, con todo lo que esa aceptacion habria implicado para una verdadera modernizacion nacional. Por ello, la ilegitimidad de Eva, su resentimiento y su mal gusto son los emblemas de fondo en los que se tejen las tramas redundantes de una obsesion argentina, pues, en su origen, el mito habia sabido, por primera vez en la historia, colocar al mismo nivel el amor y la politica como un discurso posible del populismo. Ese paso, en definitiva, habia podido suscitar una nueva capacidad de lectura basada en la imaginacion melodramatica de las masas. Y alli estaria el hondo significado de la razon de una vida que ahora surge con nuevo sentido a la luz de esta investigacion. (Jose Amicola)

Rostros y mascaras de Eva Perón - Susana Rosano

$19.380
Rostros y mascaras de Eva Perón - Susana Rosano $19.380

Susana Rosano acomete aqui la tarea de cuestionarse sobre los motivos de la proliferacion del mito de Eva Peron en la literatura argentina. Asi, descubre que esa formidable recuperacion y diseminacion simbolica no puede ser ajena a otros procesos sociales de la Argentina. De alli que el interes de este trabajo consista en su manera de vincular elementos aparentemente dispersos para engarzarlos en una red de sentido que echa luz sobre el presente. En su indagacion Susana Rosano hace fundamental hincapie en una rama espuria de la genealogia literaria argentina, que viene siend caracterizada como la de los hijos bastardos (de Borges y/o de Eva), apoyada en la idea de una filiatria, segun la habia expresado con especial suspicacia Witold Gombrowicz ya en la decada del 50. En este sentido dice Rosano: Desubicar el mito de Eva Peron, desapropiarlo, hacerlo impropio en un contexto que subvierte las condiciones de posibilidad del relato nacionalista es, ademas de una blasfemia, un intento desesperado y melancolico por desbaratar el discurso excluyente del nosotros articulado desde los relatos nacionales. El texto de Susana Rosano realiza, por lo tanto, una rearticulacion poniendo sumo cuidado en hacer visibles las esferas de genero, del populismo y de la modernidad segun los movilizo el peronismo, con la particularidad, ademas, de considerarlos como pilares de significacion de una maquinaria donde las mujeres (y no solo Eva Peron) se inscribirian en forma dinamica e iconizada dentro de una productividad nacionalista que implicaba una reformulacion del Estado. De ese modo, lo que vendria a originarse a partir de Eva como figura iconica, seria, en definitiva, la aparicion a flor de piel del inconsciente literario del peronismo, asi como la revancha sobre las fuerzas en pugna que impidieron a la persona real aceptar la candidatura a la Vicepresidencia el 22 de agosto de 1951, con todo lo que esa aceptacion habria implicado para una verdadera modernizacion nacional. Por ello, la ilegitimidad de Eva, su resentimiento y su mal gusto son los emblemas de fondo en los que se tejen las tramas redundantes de una obsesion argentina, pues, en su origen, el mito habia sabido, por primera vez en la historia, colocar al mismo nivel el amor y la politica como un discurso posible del populismo. Ese paso, en definitiva, habia podido suscitar una nueva capacidad de lectura basada en la imaginacion melodramatica de las masas. Y alli estaria el hondo significado de la razon de una vida que ahora surge con nuevo sentido a la luz de esta investigacion. (Jose Amicola)