Abrir la puerta para salir a jugar. ¿Se acuerdan de cuando éramos chicos? Hacerse amigo de otro pibe podía ser lo más fácil del mundo. Verse por primera vez, presentarse, contar de qué cuadro sos, ponerse a jugar y en algún momento preguntar: ¿no querés ser mi amigo? Todo eso en una tarde. Y que del otro lado te dijeran que sí. Abrazarte con esa otra persona como si no te fueras a separar de ella nunca. Así es cuando uno tiene esa edad. Simple. Intenso. Inofensivo. Sin maldad. Después, la vida dirá si esa amistad va a perdurar o solo fue una de la infancia, de un verano, de una tarde. Pero, ¿qué pasa cuando ese amigo no es otro nene del barrio o de la escuela? Cuando ese amigo es... ¿Qué pasa cuando uno crece y esa persona no acepta salir de nuestras vidas? ¿Qué pasa cuando se abrió otro tipo de puerta y lo que salió no es para nada un amigo? El terror se puede manifestar de varias formas, como así también darse a conocer por muchos nombres inolvidables. ¿Los conocen? Uno es Raúl. El otro, Camilo de Cabo. ¿Se animan a salir a jugar con ellos? Leo Oyola

Raúl - Camilo de Cabo

$27.000
Raúl - Camilo de Cabo $27.000

Abrir la puerta para salir a jugar. ¿Se acuerdan de cuando éramos chicos? Hacerse amigo de otro pibe podía ser lo más fácil del mundo. Verse por primera vez, presentarse, contar de qué cuadro sos, ponerse a jugar y en algún momento preguntar: ¿no querés ser mi amigo? Todo eso en una tarde. Y que del otro lado te dijeran que sí. Abrazarte con esa otra persona como si no te fueras a separar de ella nunca. Así es cuando uno tiene esa edad. Simple. Intenso. Inofensivo. Sin maldad. Después, la vida dirá si esa amistad va a perdurar o solo fue una de la infancia, de un verano, de una tarde. Pero, ¿qué pasa cuando ese amigo no es otro nene del barrio o de la escuela? Cuando ese amigo es... ¿Qué pasa cuando uno crece y esa persona no acepta salir de nuestras vidas? ¿Qué pasa cuando se abrió otro tipo de puerta y lo que salió no es para nada un amigo? El terror se puede manifestar de varias formas, como así también darse a conocer por muchos nombres inolvidables. ¿Los conocen? Uno es Raúl. El otro, Camilo de Cabo. ¿Se animan a salir a jugar con ellos? Leo Oyola