¿Cómo narrar uno de los períodos más oscuros de nuestra historia? ¿Qué contar? ¿Desde qué lugar? Son algunas de las preguntas que nos plantea esta antología con grandes autoras argentinas contemporáneas, de diferentes generaciones, todas ellas comprometidas con la lucha por la memoria, el reclamo de justicia y la palabra. Luisa Valenzuela imagina el destino de un cómplice de la represión en Los censores, uno de sus cuentos más emblemáticos. Sara Rosenberg, escritora exiliada, denuncia la complicidad civil necesaria para tanta atrocidad. Elsa Osorio nos habla de las secuelas de la tortura en aquellos que las sufrieron en primera persona y de la necesidad de justicia para poder sanar. Su historia está ambientada años después de la vuelta a la democracia. Victoria Mora, la más joven de la selección, se atreve a un cruce con lo fantástico en Aparecidos, un relato en donde las víctimas de aquellos años se hacen presentes frente a su asesino, todavía impune. También hemos incluido algunos de los poemas escritos en la ESMA por la poeta desaparecida Ana María Ponce; como dijo Juan Gelman sobre ella: Poco se sabe sobre sus últimos momentos de vida, lo que sí se sabe es que la poesía la hizo más libre que a sus asesinos. Y, para cerrar, Ángela Pradelli nos cuenta la historia de Jorgelina, una de las hijas apropiadas por la dictadura, con complicidad de la Iglesia y la Justicia; la lucha de su abuela, su hermano y ella misma para recuperar su identidad.
Textos escritos por mujeres, quizás inspiradas en la lucha de toda una generación y en la de las Madres de Plaza de Mayo, que ponen su voz a los reclamos de Memoria, Verdad y Justicia.

Mujeres por la memoria - Luisa Valenzuela y otras

$18.300
Mujeres por la memoria - Luisa Valenzuela y otras $18.300

¿Cómo narrar uno de los períodos más oscuros de nuestra historia? ¿Qué contar? ¿Desde qué lugar? Son algunas de las preguntas que nos plantea esta antología con grandes autoras argentinas contemporáneas, de diferentes generaciones, todas ellas comprometidas con la lucha por la memoria, el reclamo de justicia y la palabra. Luisa Valenzuela imagina el destino de un cómplice de la represión en Los censores, uno de sus cuentos más emblemáticos. Sara Rosenberg, escritora exiliada, denuncia la complicidad civil necesaria para tanta atrocidad. Elsa Osorio nos habla de las secuelas de la tortura en aquellos que las sufrieron en primera persona y de la necesidad de justicia para poder sanar. Su historia está ambientada años después de la vuelta a la democracia. Victoria Mora, la más joven de la selección, se atreve a un cruce con lo fantástico en Aparecidos, un relato en donde las víctimas de aquellos años se hacen presentes frente a su asesino, todavía impune. También hemos incluido algunos de los poemas escritos en la ESMA por la poeta desaparecida Ana María Ponce; como dijo Juan Gelman sobre ella: Poco se sabe sobre sus últimos momentos de vida, lo que sí se sabe es que la poesía la hizo más libre que a sus asesinos. Y, para cerrar, Ángela Pradelli nos cuenta la historia de Jorgelina, una de las hijas apropiadas por la dictadura, con complicidad de la Iglesia y la Justicia; la lucha de su abuela, su hermano y ella misma para recuperar su identidad.
Textos escritos por mujeres, quizás inspiradas en la lucha de toda una generación y en la de las Madres de Plaza de Mayo, que ponen su voz a los reclamos de Memoria, Verdad y Justicia.