Las gramáticas del poder de Occidente sólo encubren un linaje colonial, conocido como la historia sistemática de la “herida colonial”, la “bestialización de los cuerpos” y la “desaparición de las tradiciones originarias”. Desde entonces sabemos que “Humanismo y Terror” resultan inseparables. En el siglo XVI se produce un proceso de reafirmación de las lenguas, que es concurrente con la formación de los Estados Nación. Las lenguas “minorizadas” se describían como carentes de una gramática elaborada y debían ser reducidas al “Uno” de la gramática imperial”. El Estado implica un territorio defendido en sus fronteras por un ejército, una constitución escrita y una única Nación. El principio de “lingüisticidad” es definitorio en el interior del concepto de Nación: más importante que el de religión o el de historia común. La normalización y normativización de las lenguas de los pueblos conquistados fue el propósito principal. El Estado Nación articula esta gramática y no la Humanidad en el camino de la evolución general. El amo nombra, define y clasifica. Ante ello, consideramos indispensable abordar las relaciones estético-políticas que nos permitan un “senti-pensar” crítico y poético.

Meditaciones sobre la lengua - AAVV

$22.000
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Las gramáticas del poder de Occidente sólo encubren un linaje colonial, conocido como la historia sistemática de la “herida colonial”, la “bestialización de los cuerpos” y la “desaparición de las tradiciones originarias”. Desde entonces sabemos que “Humanismo y Terror” resultan inseparables. En el siglo XVI se produce un proceso de reafirmación de las lenguas, que es concurrente con la formación de los Estados Nación. Las lenguas “minorizadas” se describían como carentes de una gramática elaborada y debían ser reducidas al “Uno” de la gramática imperial”. El Estado implica un territorio defendido en sus fronteras por un ejército, una constitución escrita y una única Nación. El principio de “lingüisticidad” es definitorio en el interior del concepto de Nación: más importante que el de religión o el de historia común. La normalización y normativización de las lenguas de los pueblos conquistados fue el propósito principal. El Estado Nación articula esta gramática y no la Humanidad en el camino de la evolución general. El amo nombra, define y clasifica. Ante ello, consideramos indispensable abordar las relaciones estético-políticas que nos permitan un “senti-pensar” crítico y poético.