Sea en los debates académicos o en las noticias, se nos recuerda constantemente que el mundo enfrenta retos trascendentales, efectos de un mundo común globalizado donde las infraestructuras de desplazamiento (de mercancías, ideas, gente) proliferan constantemente alimentadas por el extractivismo. Sin embargo, cuando se discute cómo enfrentar esos retos, parece que la única respuesta consiste en nuevas formas de extractivismo y más infraestructuras de desplazamiento. Este libro es, sobre todo, una invitación a explorar el terreno en el que puede prosperar una imaginación política que abrace lo incomún y cultive el emplazamiento. Plantea un reto: cómo, en un contexto donde para muchos las infraestructuras de desplazamiento son todo lo que hay, se pueden generar infraestructuras de emplazamiento robustas. Este reto no consiste en solidarizarse con una minoría amenazada por el avance de la frontera extractivista “allá”; más bien, se trata de imaginar una buena vida “aquí” que no se base en las infraestructuras de desplazamiento de las que muchos de nosotros dependemos (y que incluso amamos). El reto del libro es embarcarse en un viaje “para dejar de ser lo que somos”.
Combinando las intuiciones extraídas de su experiencia etnográfica de décadas en las “fronteras del extractivismo” (en Sudamérica y el subártico canadiense) y discusiones que han reformulado la pregunta política fundamental (de cómo vivir bien juntos) como una cuestión cosmopolítica, Mario Blaser ofrece una ontología política en la que historias y visiones de una buena vida con orientaciones escalares divergentes ayudan a establecer las coordenadas del viaje y a visualizar algunos de los desafíos que una política orientada a lo incomún debe afrontar para prosperar.

Incomún. Un ensayo de ontología política para el fin del mundo - Mario Blaser

$23.000
Incomún. Un ensayo de ontología política para el fin del mundo - Mario Blaser $23.000

Sea en los debates académicos o en las noticias, se nos recuerda constantemente que el mundo enfrenta retos trascendentales, efectos de un mundo común globalizado donde las infraestructuras de desplazamiento (de mercancías, ideas, gente) proliferan constantemente alimentadas por el extractivismo. Sin embargo, cuando se discute cómo enfrentar esos retos, parece que la única respuesta consiste en nuevas formas de extractivismo y más infraestructuras de desplazamiento. Este libro es, sobre todo, una invitación a explorar el terreno en el que puede prosperar una imaginación política que abrace lo incomún y cultive el emplazamiento. Plantea un reto: cómo, en un contexto donde para muchos las infraestructuras de desplazamiento son todo lo que hay, se pueden generar infraestructuras de emplazamiento robustas. Este reto no consiste en solidarizarse con una minoría amenazada por el avance de la frontera extractivista “allá”; más bien, se trata de imaginar una buena vida “aquí” que no se base en las infraestructuras de desplazamiento de las que muchos de nosotros dependemos (y que incluso amamos). El reto del libro es embarcarse en un viaje “para dejar de ser lo que somos”.
Combinando las intuiciones extraídas de su experiencia etnográfica de décadas en las “fronteras del extractivismo” (en Sudamérica y el subártico canadiense) y discusiones que han reformulado la pregunta política fundamental (de cómo vivir bien juntos) como una cuestión cosmopolítica, Mario Blaser ofrece una ontología política en la que historias y visiones de una buena vida con orientaciones escalares divergentes ayudan a establecer las coordenadas del viaje y a visualizar algunos de los desafíos que una política orientada a lo incomún debe afrontar para prosperar.