Wakayama Bokusui es recordado en Japón como el poeta viajero y el poeta del sake. Pasó gran parte de su vida caminando, como los antiguos monjes, y escribiendo poemas hermanados con la naturaleza y cargados de soledad. “Cuántos montes / cuántos ríos / tendré que atravesar / hasta llegar al país aquel / donde termina la tristeza; / hoy sigo mi viaje”, dice uno de sus tanka. Esta edición bilingüe y anotada presenta por primera vez en español la poesía de Bokusui, junto con algunas de sus caligrafías.

Sobre Wakayama Boukusui

“Al primer vistazo, su porte de caminante y su rostro quemado por los viajes hacían sentir que la sombra de Saigyō había regresado. Recuerdo al maestro Bokusui volviendo de la montaña con sus manos llenas; no de flores esplendorosas sino de simples flores silvestres”. KAWABATA YASUNARI

 

“Todos los años, al cumplirse un nuevo aniversario de su muerte, van a la choza de Bokusui los poetas, los pintores y los aldeanos. Allí encienden el fogón y arrojan hierbas aromáticas. Y dicen poemas, y cantan alguna canción. Yo hubiera querido cantar esa tarde, pero apenas pude cajonear una vidala sin palabras: ‘️Lloran las ramas del viento’”. ATAHUALPA YUPANQUI

El país de la primavera triste - Wakayama Bokusui

$26.000
El país de la primavera triste - Wakayama Bokusui $26.000

Wakayama Bokusui es recordado en Japón como el poeta viajero y el poeta del sake. Pasó gran parte de su vida caminando, como los antiguos monjes, y escribiendo poemas hermanados con la naturaleza y cargados de soledad. “Cuántos montes / cuántos ríos / tendré que atravesar / hasta llegar al país aquel / donde termina la tristeza; / hoy sigo mi viaje”, dice uno de sus tanka. Esta edición bilingüe y anotada presenta por primera vez en español la poesía de Bokusui, junto con algunas de sus caligrafías.

Sobre Wakayama Boukusui

“Al primer vistazo, su porte de caminante y su rostro quemado por los viajes hacían sentir que la sombra de Saigyō había regresado. Recuerdo al maestro Bokusui volviendo de la montaña con sus manos llenas; no de flores esplendorosas sino de simples flores silvestres”. KAWABATA YASUNARI

 

“Todos los años, al cumplirse un nuevo aniversario de su muerte, van a la choza de Bokusui los poetas, los pintores y los aldeanos. Allí encienden el fogón y arrojan hierbas aromáticas. Y dicen poemas, y cantan alguna canción. Yo hubiera querido cantar esa tarde, pero apenas pude cajonear una vidala sin palabras: ‘️Lloran las ramas del viento’”. ATAHUALPA YUPANQUI