Cuando su pareja lo abandona, un hombre decide empezar a escribir un diario. Pocos días después se decreta el aislamiento preventivo y obligatorio. La vida íntima y social se desarman, los seres que habitan el hogar orbitan alrededor de una ausencia y el cuerpo se disocia de su mente. “Ahora vas a tener que aprender a estar solo”, son las palabras que le llegan de su vecino, la persona que queda más cerca de él. De a poco, el hombre empieza terapia, sale a trabajar, intenta nuevos hábitos. Los fragmentos intentan reconstruir, a través de la escritura y del paso del tiempo, una nueva subjetividad. Y qué mejor que aprender de lo vivido para tomarse las cosas con un poco más de humor.

Tomás Catena experimenta con la escritura como si fuera un juego, con la libertad, la ligereza y la pericia que nos permite probarlo todo. Ponerse en ridículo en primer lugar para reflexionar, de manera crítica y aguda, los modos en que intentamos día a día aprender y desaprender a vivir juntxs.

 

Inés Kreplak

Diario de mi separación - Tomás Catena

$8.000
Diario de mi separación - Tomás Catena $8.000

Cuando su pareja lo abandona, un hombre decide empezar a escribir un diario. Pocos días después se decreta el aislamiento preventivo y obligatorio. La vida íntima y social se desarman, los seres que habitan el hogar orbitan alrededor de una ausencia y el cuerpo se disocia de su mente. “Ahora vas a tener que aprender a estar solo”, son las palabras que le llegan de su vecino, la persona que queda más cerca de él. De a poco, el hombre empieza terapia, sale a trabajar, intenta nuevos hábitos. Los fragmentos intentan reconstruir, a través de la escritura y del paso del tiempo, una nueva subjetividad. Y qué mejor que aprender de lo vivido para tomarse las cosas con un poco más de humor.

Tomás Catena experimenta con la escritura como si fuera un juego, con la libertad, la ligereza y la pericia que nos permite probarlo todo. Ponerse en ridículo en primer lugar para reflexionar, de manera crítica y aguda, los modos en que intentamos día a día aprender y desaprender a vivir juntxs.

 

Inés Kreplak