Álbum de lluvia es la segunda expedición de Freddy Ñáñez en tierras del haiku, este delicado libro se nos ofrece como un taller particular en el que sus reglas —la cesura métrica, el Kigo y la fidelidad al acontecimiento— se conjugan con la incorporación de un paisaje endémico y tropical, donde la única norma es el cambio y una sensibilidad predispuesta a la belleza intelectual. Muy consciente de que el camino hacia la sencillez del haiku es largo y esquivo para la lógica occidental, Ñáñez ensaya la suspensión de toda retórica, ya sea lírica o filosófica, para darse por completo a la pura emoción. El resultado es esta visible y genuina batalla ética y estética donde, la mayoría de las veces, sale ganando la inocencia.
Álbum de lluvia está acompañado, además, por un compendio de notas tituladas En los alrededores del haiku, donde el lector hallará las reflexiones de Ñáñez sobre su experiencia en este perfume oriental. Dice el autor en una de ellas: «Un lector que busca sentido a todo quedará excluido del haiku y relegado junto al autor que pretende darlo. Tanto en el haiku, como en el amor, todo se resume a una acción: aprender a recibir».

Álbum de lluvia - Freddy Ñáñez

$8.000
Álbum de lluvia - Freddy Ñáñez $8.000

Álbum de lluvia es la segunda expedición de Freddy Ñáñez en tierras del haiku, este delicado libro se nos ofrece como un taller particular en el que sus reglas —la cesura métrica, el Kigo y la fidelidad al acontecimiento— se conjugan con la incorporación de un paisaje endémico y tropical, donde la única norma es el cambio y una sensibilidad predispuesta a la belleza intelectual. Muy consciente de que el camino hacia la sencillez del haiku es largo y esquivo para la lógica occidental, Ñáñez ensaya la suspensión de toda retórica, ya sea lírica o filosófica, para darse por completo a la pura emoción. El resultado es esta visible y genuina batalla ética y estética donde, la mayoría de las veces, sale ganando la inocencia.
Álbum de lluvia está acompañado, además, por un compendio de notas tituladas En los alrededores del haiku, donde el lector hallará las reflexiones de Ñáñez sobre su experiencia en este perfume oriental. Dice el autor en una de ellas: «Un lector que busca sentido a todo quedará excluido del haiku y relegado junto al autor que pretende darlo. Tanto en el haiku, como en el amor, todo se resume a una acción: aprender a recibir».